El Camino es un ministerio de enseñanza práctica, que se ocupa de enseñarle a las personas cómo transformar sus vidas de negativas y llenas de temor a positivas y llenas de gozo. La transformación ocurre cuando las personas creen y aplican las verdades espirituales básicas que son dadas a conocer en la Palabra de Dios.
Para que el plan de Dios en Su Palabra sea dado a conocer, se requiere de alguien que la enseñe a estudiantes deseosos—aquellos que desean conocer la voluntad de Dios.
Romanos 12:2:
No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cual sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
Después de recibir todas estas enseñanzas perspicaces, nosotros estamos energizados nuevamente y renovados en nuestro compromiso de servir a Dios nuestro Padre con un entendimiento más profundo de Su voluntad.
Qué tiempo tan enriquecedor tuvimos en doctrina, comunión, partimiento del pan y oraciones. Las enseñanzas de la Palabra de Dios fueron asombrosas. Eran vivas e interesantes con mucho aprendizaje práctico. Podremos comenzar ahora a aplicar mucho de lo que fue enseñado—fijar patrones basados en la Biblia, tener visión conforme a Dios, salir de nuestras zonas de comodidad y tener el poder para efectuar cambios. Todo esto nos traerá mayor calidad de vida a medida que nosotros, por nuestra parte, compartamos la Palabra de Dios en amor.