Génesis 2:7:
Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente.
Génesis 3:19:
Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás.
Salmos 6:5:
Porque en la muerte no hay memoria de ti; En el Seol, ¿quién te alabará?
Salmos 49:17:
Porque cuando muera no llevará nada, Ni descenderá tras él su gloria.
Salmos 115:17:
No alabarán los muertos a JAH, Ni cuantos descienden al silencio.
Salmos 146:4:
Pues sale su aliento, y vuelve a la tierra; En ese mismo día perecen sus pensamientos.
Eclesiastés 3:20:
Todo va a un mismo lugar; todo es hecho del polvo, y todo volverá al mismo polvo.
Eclesiastés 9:5,6,10:
Porque los que viven saben que han de morir; pero los muertos nada saben, ni tienen más paga; porque su memoria es puesta en olvido.
También su amor y su odio y su envidia fenecieron ya; y nunca más tendrán parte en todo lo que se hace debajo del sol.
Todo lo que te viniere a la mano para hacer, hazlo según tus fuerzas; porque en el Seol, adonde vas, no hay obra, ni trabajo, ni ciencia, ni sabiduría.
Eclesiastés 12:7:
y el polvo vuelva a la tierra, como era, y el espíritu vuelva a Dios que lo dio.
I Corintios 15:32:
Si como hombre batallé en Efeso contra fieras, ¿qué me aprovecha? Si los muertos no resucitan, comamos y bebamos, porque mañana moriremos.
I Tesalonicenses 4:16 y 17:
Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero.Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.